PETROVIC REPITE TITULO PESE A UN GRAN SABONIS


Avanzamos un año en nuestro particular viaje al pasado de nuestro baloncesto, y llegamos a 1986, donde van a chocar dos estilos tan antagónicos como odiados entre ellos: la Cibona de Zagreb y el Zalgiris de Kaunas.

Ambos equipos dominaron con autoridad la liguilla, donde dejaron atrás a Milan, Madrid, Maccabi y Limoges, para plantarse en la gran final de Budapest. Cibona quería repetir el título del año anterior mientras que Zalgiris, apoyado por una generación dorada, buscaba su primer entorchado en la máxima competición continental.

                                                 Petrovic (10) se lleva a casa el preciado trofeo

Analizando a los dos equipos, vemos como Cibona repite el esquema que tantos éxitos le reportó el año anterior pero con matices. Darko Cvjeticanin (pedazo de jugador) sustituye en el quinteto a Aza Petrovic que se encontraba lesionado y no pudo jugar la final. Cvjeticanin formaba línea exterior con Drazen Petrovic y Sven Usic, que en esta ocasión dejó en el banquillo a Zoran Cutura. Por dentro, los pívots eran Mihovil Nakic y Franjo Arapovic, que ocupó el lugar de Knego.

Desde el banquillo, aportaban el mencionado Cutura, el alero Damir Pavlicevic y el pívot Branko Vukicevic, a los mandos Novosel dejó su lugar a Zeljko Pavlicevic.

En los lituanos (aún soviéticos) un quinteto clásico: como base Valdemaras Homicius, de aleros el grandísimo tirador Rimas Kurtinaitis y el veterano Serguei Jovaisha, y por dentro Gintaras Krapikas apoyaba a la gran estrella del equipo, “El Zar” Arvydas Sabonis. Como suplentes, el base Brazis, el alero Visockas y los pívots Civilis y Lekarauskas y como entrenador, otro mito de los banquillos, Vladas Garastas.

Mucha tensión previa al partido, con declaraciones cruzadas subidas de tono, con el siempre provocativo Petrovic y un Sabonis quizás extramotivado que, como veremos más adelante, le pasaría factura a lo largo del encuentro. Empieza el encuentro con alternancia en el marcador (5-2, 7-9) destacando la figura inesperada de Usic por parte yugoslava (11-11, 15-15).

El partido se mantenía igualado, y sólo la inspiración de Sabonis dio ventaja a los soviéticos (19-21, 22-25). Petrovic no quería quedarse atrás y un triple suyo daba la vuelta al partido (31-28), ahí los croatas apoyados en la gran prestación de su alero Usic ponía tierra de por medio (38-30, 39-32) aunque Homicius salía al rescate de los suyos (41-36, 45-39), aún así Cibona se marchó al descanso ocho arriba (47-39). Los máximos anotadores al descanso fueron Petrovic (15 puntos) por los croatas y Sabonis (17) por los lituanos.




                                                      Petrovic (10) y Sabonis (11), dos tops mundiales de los 80


La segunda parte nos traería emociones fuertes, merece la pena recordarlas. Cibona arranca fuerte de la mano de Usic (54-42) y Cvjeticanin (58-46) a lo que replica Sabonis (60-54). Era una guerra en ambas canastas y comenzaron los roces (62-57, 66-61). Nakic y Cutura suman y sólo Sabonis responde para los lituanos.

Con 68 a 61 para Cibona llega la jugada decisiva. Nakic y Krapikas se enzarzan tras falta del lituano y de repente aparece Sabonis totalmente desatado y golpea al yugoslavo…una acción que le costó la eliminación a Arvydas (por quinta falta, no por descalificante) y ahí se acabó la resistencia del Zalgiris…

Petrovic comenzó su show (75-65) al que seguían los Nakic, Cvejiticanin…y las diferencias empezaron a crecer (80-67, 84-69), Zalgiris sin su líder intentó la reacción (84-75) pero no fue suficiente, porque Cibona iba embalado a por su doblete (88-75, min 38), sólo quedaba descontar los minutos para la victoria croata que se consumó con el bocinazo final (94-82) ¡¡¡Cibona campeón por segunda vez consecutiva¡¡¡

 

ANOTADORES:

Cibona: 94 – Petrovic 22 Usic 23 Cvjeticanin 24 Nakic 7 Arapovic 2 – Vukicevic 0 Cutura 16 Pavlicevic 0.

Zalgiris: 82 -  Homicius 13 Kurtinaitis 5 Jovaisha 18 Krapikas 4 Sabonis 27 – Visockas 3 Brazis 6 Civilis 6 Lekarauskas 0.

 

Cibona se proclamaba campeón por segunda vez repitiendo esquema de juego, pero en esta ocasión no necesitó de un Petrovic “en modo Dios” ya que contó con la aportación de Usic y Cvjeticanin (47 puntos combinados), con lo que los 22 puntos del genio de Sibenik fueron más que suficientes para alzarse con el título.

Por su parte, Zalgiris no estuvo a un nivel supremo para poder pelear el partido. Muy lastrados por la floja actuación de Kurtinaitis (sólo 5 puntos) y a pesar de los 27 puntos de Sabonis, el equipo lituano apenas estuvo por delante hasta la mitad de la primera parte. Y como comentamos antes, la quinta falta de Sabonis fue la sentencia para los de Garastas. Justo campeón Cibona…ahora llegamos a territorio Macdoo, otra buena historia para no perdérsela.

 

Comentarios

Entradas populares de este blog

LOS NIÑOS VIENEN DE LISBOA...Y DE NIGERIA

CELTICS – LAKERS: UNA RIVALIDAD INTIMA E HISTÓRICA

UNA NOCHE PARA EL RECUERDO: EL 12-1 A MALTA