MACCABI SE CORONA EN UN FINAL POLÉMICO
En la
segunda edición de la Copa de Europa en la década de los 80, se verían las
caras el Maccabi Tel Aviv israelí y el Sinudyne Bolonia italiano.
En esta final de 1981, el
conjunto israelí repetía el mismo bloque de la temporada anterior cuando perdió
la final ante el Real Madrid, con su pareja interior de americanos Perry y
Williams y el talento de Berkowitz en el exterior, esta vez dirigidos desde el banquillo por Rudy
D´Amico.
Los
italianos contaban con el base Caglieris, los aleros Piero Valenti y Marco
Bonamico y por dentro su estrella Renato Vilalta y el brasileño Marcos Leite “Marquinhos”.
El equipo dependía de Vilalta y en menor medida de Bonamico y tuvieron la mala
suerte de la lesión de su alero norteamericano McMillan días antes de la final,
lo que seguramente les privó de un mejor rendimiento ofensivo.
Berkowitz fue decisivo para la victoria con 21 puntos
En esta
temporada, el sistema de competición cambió y los seis clasificados de cada
grupo se enfrentaron en una Main Round (todos contra todos) para dilucidar los
dos finalistas. Bolonia fue un ciclón ganando la ronda con autoridad mientras
que Maccabi sufrió de lo lindo para alcanzar la segunda plaza y llegar a la
finalísima.
Dicho
encuentro final tuvo lugar en Estrasburgo. Leyendo crónicas italianas, se
criticó tremendamente la sede por lo pequeño del pabellón y se cuenta que para
cuando los “tiffosi” italianos llegaron al pabellón, ya estaba ocupado en casi
su totalidad por aficionados macabeos, con el consiguiente mosqueo de los de
Bolonia y el ambiente más que favorable para los macabeos.
Y vamos
al partido. Los italianos, de la mano de unos colosales Bonamico (26 puntos) y Vilalta
(19) hacían soñar a sus aficionados con conseguir el título y llevaron la
delantera en el marcador durante la primera mitad (34-25, 39-37).
Pero
tal y como le sucedió al Madrid, Maccabi es mucho equipo y a través de un
inspirado Berkowitz (21 puntos para el alero) comenzaron a remontar y en este caso a liderar el partido
(43-53), pero cuando pareció todo hecho para los israelitas, los italianos reaccionaron de la mano de
Bonamico e igualar la contienda (61-61).
Bonamico (26 puntos) mantuvo a los suyos con opciones hasta el final
Nos
vamos así a un final apasionante y muy polémico. Domina Maccabi por tres puntos
gracias a un tapón colosal de Williams y dos tiros libres de Berkowitz (75-78)
pero otros dos tiros libres convertidos por Bonamico aprietan el marcador a falta
de 30 segundos (77-78). Falta en ataque de Berkowitz con 20 segundos para el
final y bola italiana para llevarse la Copa de Europa. La responsabilidad de
nuevo para Bonamico, quién penetra pero se encuentra con un defensor y recibe
falta en ataque…una falta que vista una y otra vez ¡¡¡no era¡¡¡
Tras la
discusión y las protestas italianas, Berkowitz anotó una bandeja fácil para
sentenciar la final (77-80) y de nada valió una postrera canasta italiana
(79-80).
Anotadores:
Maccabi: 80 – Aroesti 5 Berkowitz 21 Silver 6
Perry 16 Williams 20 – Boatwright 12 Zysman 0 Schwarz 0
Sinudyne: 79 –
Caglieris 7 Valenti 4 Bonamico 26 Vilalta 19 Marquinhos 13 – Cantamessi 4
Martini 2 Generali 4.
Maccabi consigue su segunda Copa de Europa con un quinteto
que se repetirá durante la primera mitad de los años 80 mientras que los italianos
se quedaron a las puertas del título y aún se lamentan los aficionados italianos de lo que hubiera
pasado si McMillan hubiese podido jugar ese partido…así es el baloncesto.
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