BORMIO 87: KUKOC, DIVAC, RADJA, PAYTON…EL AÑO 0


Hoy nuestro recuerdo se va hasta 1987 y el Campeonato del Mundo sub19 de baloncesto disputado en la localidad italiana de Bormio.

                               Un equipo histórico este del 87 con Pesic como entrenador

En el valle de la Valtellina se dieron cita los mejores equipos juniors del mundo, y ahí en Bormio, el baloncesto moderno (sin que nosotros aún lo supiésemos) cambiaría para siempre.

El torneo nos dejó la presentación de nuevos y jóvenes talentos tanto europeos: los soviéticos Babkov y Vetra, los italianos Rusconi, Pittis y Gentile, los alemanes Harnisch y Rodl así como fuera de nuestro continente como los australianos Luc Longley y Shane Heal.

Mención aparte merecen los dos protagonistas de nuestro partido: Yugoslavia y Estados Unidos.
Este era el tercer Mundial Sub19 que se disputaba y los dos primeros habían sigo ganados por los americanos. Sin embargo, este dominio se vería sacudido por la irrupción de unos jóvenes talentosos llegados de los Balcanes.

En semifinales, Estados Unidos venció con apuros a Italia que jugaba en casa (89-84) mientras que Yugoslavia se imponía con comodidad a Alemania (89-64).

Así pues todo estaba dispuesto para ver si los jóvenes plavi (apodados por la prensa los “Harlem blancos”) podían romper el dominio estadounidense, pero antes las presentaciones:

En Estados Unidos, el equipo estaba dirigido por Larry Brown (campeón NBA en 2004 con Detroit) y en sus filas contaba con jugadores que hicieron gran carrera y otros que se quedaron en jóvenes promesas. Analizamos el roster:

Los bases eran Kevin Pritchard y Gary Payton. Pritchard partiendo como titular, fue un base discreto en la NBA con cuatro temporadas y que además pasó por España jugando en Cáceres, mientras que la carrera de Payton fue mucho más prolífica ganando un anillo (2006 con Miami) y jugando finales con Seattle, amén de un paso destacado por Milwaukee y Los Angeles.

                                 Gary Payton "The Glove" fue una gran estrella de la NBA 

A veces, Brown gustaba de jugar con dos bases en pista, cuando no era así, los aleros titulares eran Stephen Thompson y Robert Brickey los que ocupan esas posiciones.

Thompson apenas jugó un año en NBA (Orlando) y se movió por Europa y Japón en una corta carrera. A Brickey le fue aún peor, de gran estrella universitaria en Duke pasó al ostracismo por culpa de una lesión de rodilla.

Sin embargo, a sus suplentes en ese equipo les fue mejor en su etapa profesional. Stacey Augmon “The Plastic Man” estuvo quince temporadas en la NBA aunque apenas jugó en Bormio. Junto a él, el escolta Labradford Smith, dos años en NBA y luego en Europa en Polonia y España (León quién en palabras de un maestro Joaquín Rodríguez “era un escolta de mucho talento con el que llegamos a semifinales de Copa en León año 1997”)

Por último, miremos los pívots. Brown solía salir con Lionel Simmons y Scott Williams como titulares. Simmons tuvo una buena carrera en la NBA jugando para Sacramento Kings siete temporadas y promediando 12 puntos por partido. A Williams le fue aún mejor ya que a sus quince temporadas en la NBA pudo sumarle tres anillos de campeón con los Bulls (91, 92 y 93)

Los suplentes también tuvieron éxito en la NBA: Larry Jonhson (alias “Big Mama”) diez años en la NBA y finalista con los Knicks, Brian Williams (luego cambió su nombre a Bison Dele y falleció en extrañas circunstancias) ocho años de profesional y un anillo de la NBA (1997) y por último Dwayne Schintzius, nueve años en la NBA y fallecido en 2002 (recordaremos también su papel en la película “Eddie”)

Vamos a ver como fue el arranque del partido antes de conocer a los yugoslavos. El encuentro comienza con alternativas en el marcador (2-3, 6-5) pero rápidamente los yugoslavos toman el mando del partido (13-7, 19-9) hasta la máxima de trece (22-9)

Los americanos se ven impotentes para parar el vendaval ofensivo de los plavi y la ventaja no para de aumentar (24-11, 28-13). Transcurridos doce minutos, los yugoslavos parecen tener la final en el bolsillo (29-15) pero entre las rotaciones yugoslavas (31-21) y la intensidad americana, las diferencias comienzan a bajar (31-27)

Un parcial de 0-10 aprieta de nuevo el marcador (31-29) y los americanos consiguen adelantarse cerca del descanso (recordad que eran dos partes de veinte minutos cada una 40-41) para finalmente marcharse tres arriba al descanso (40-43)

Lionel Simmons había anotado once puntos al descanso y era el máximo anotador norteamericano mientras que en los yugoslavos Nebojsa Ilic fue el mejor con 14.

Precisamente con Ilic iniciamos el repaso del conjunto yugoslavo. Ilic y Toni Kukoc formaban la pareja de aleros, Ilic prometía mucho pero apenas jugó dos años en Cáceres fuera de su país mientras que Kukoc fue estrella mundial ganando prácticamente todo (Eurobasket, Mundobasket, 3 Euroligas y 3 anillos NBA, sólo le faltaron los Juegos donde ganó dos platas)

                       Kukoc (7) ganó todo en Europa y obtuvo tres anillos de la NBA

El base titular era Luka Pavicevic (ganador de tres Euroligas con la Jugoplastika) mientras que los pívots son dos leyendas: Dino Radja, de tremenda carrera en Europa (Jugoplastika, Roma), NBA (Boston Celtics) y selección (tanto Yugoslavia como Croacia) y Vlade Divac (estrella en los Lakers y Kings y pívot titular de la gran Yugoslavia de finales de los 80 y los años 90)

El equipo estaba dirigido por un eterno de los banquillos: Svetislav Pesic (seguro que os suena). Pesic es eterno porque le vamos a ver desde el 87 hasta la actualidad ganando con la selección alemana, Alba Berlín, Yugoslavia, Barcelona, Girona…¡¡¡un crack¡¡¡

Desde el banquillo, no estaba precisamente manco este equipo. El base “suplente” era Sasha Djorjevic (el maestro) con Euroliga y medallas internacionales a sus espaldas, los aleros eran el bosnio Samir Avdic (pasó por Málaga y Melilla), Radenko Dobras (que hizo carrera en la NCAA en South Florida e Israel) y Zoran Kalpic que jugó en Francia.

Los pívots suplentes eran Teoman Alibegovic, esloveno que jugó en Cáceres y ganó una Korac con Alba Berlín (con Pesic), Miroslav Pecarski que jugó en Panathinaikos y también en España (Gijón) y Slavisa Koprivica que ganó la Euroliga del 92 con el Partizan.

Vamos con la segunda parte del partido que promete emociones fuertes. Los americanos tendrán sus últimas ventajas en los primeros minutos de la reanudación (44-47). 

A partir de ahí, veremos el vendaval plavi con Pavlicevic (50-48) y especialmente con el despertar de Kukoc (sólo 1 punto en la primera parte), quién con dos triples comenzó a dejar claro quién mandaba en Bormio (54-50, 59-50)

De nuevo Kukoc ponía la diferencia en doce (64-52) y pese al pressing de los americanos la diferencia estaba estancada en la decena (70-60).

A falta de cinco minutos, los yugoslavos dominaban por dieciséis (76-60) y Djorjevic puso la puntilla con un triple a falta de tres minutos (81-63).

Es cierto que los americanos no bajaron los brazos pero el partido estaba ya liquidado pese a los esfuerzo de Augmon y Johnson (85-74)

El bocinazo final confirmó la victoria yugoslava (86-76). Había nacido una nueva era en el baloncesto, la era yugoslava. Con la perspectiva histórica hay que poner de relieve la importancia de esta victoria puesto que en los torneos seniors posteriores los estadounidenses sufrieron cinco derrotas (Panamericanos 87, Juegos Olimpicos 88, Mundobasket 90, Juegos de la Buena Voluntad 90 y Panamericanos 91).

ANOTADORES:

YUGOSLAVIA: 86 – Pavlicevic 7, Ilic 14, Kukoc 9, Radja 20, Divac 21 – Djorjevic 11, Dobras 4, Peckarski 0, Avdic 0. No jugaron Kalpic, Alibegovic y Koprivica.

EST. UNIDOS:  76 -  Pritchard 15, Thompson 2, Brickey 6, Simmons 13, S. Williams 5 – Payton 4, Huery 11, Augmon 4, Johnson 11, B. Williams 0, Schintzius 5, Smith 0.


Dos de estas derrotas fueron infringidas por los yugoslavos (las dos del año 90) equipo del que ya formaban parte Kukoc, Radja, Divac y Djorjevic desde el Eurobasket 87. Todas esas derrotas americanas provocaron que los profesionales jugaran por primera vez en los Juegos Olimpicos de Barcelona 92.

Por último, os cuento una anécdota. Existe una película sobre este equipo llamada “250 pasos”, un film serbio que cuenta la historia de este histórico equipo. 

El título de la cinta se debe a una anécdota mistica: el equipo estaba concentrado en la montaña de Igman, cerca de Bjelasnica (sede de los Juegos de Invierno Sarajevo 84) y para acceder a la pista debían subir 250 ESCALONES…quién no pudiera hacerlo quedaría fuera del equipo y no podría disputar el torneo….

Sin duda eran otros tiempos, pero tanto la anécdota como la hazaña quedará en nuestro recuerdo para siempre. Bormio en nuestros corazones eternamente.


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